Por ejemplo, en 1926 el arzobispo notificó a los candidatos conservadores a la presidencia que el candidato conservador a la Presidencia sería Miguel Abadía Méndez, decisión que tomó en privado sin reunirse con los candidatos para informarles de su decisión. Las elecciones eran apenas un trámite que validaba la decisión de este arzobispo. Mientras tanto, los vientos de los veinte, con sus aires de progreso y transformaciones profundas en todos los órdenes de la vida urbana y rural, impregnaban de optimismo la vida pública, se convertía en tema de admiración en los debates de los cafés que animaban la vida urbana como los nuevos espacios públicos, donde se discutía de política, literatura, música, arte, que las nuevas publicaciones las socializaban. Nuevos espacios de sociabilidad eran los hervideros de la opinión pública que animaban la vida de esta sociedad que estaba dejando de ser provinciana. Así, en muy pocos años el país dejó atrás las sombras de la muerte que la guerra de los Mil Días nos había arropado.
C onsecuencias sociales La incorporación de la mujer al sistema productivo durante el conflicto rompió el monopolio que hasta entonces habían ejercido en él los hombres, alterando con ello los esquemas tradicionales de desarrollo del capitalismo. Durante la guerra la mujer adquirió conciencia de su capacidad para desarrollar las habilidades de los hombres y demandó un creciente protagonismo en el mercado laboral. Trabajo femenino Las clases medias salieron empobrecidas del conflicto, en tanto que surgieron nuevas fortunas relacionadas con la producción de armas y la especulación de víveres. Las masas obreras sufrieron una importante pérdida del poder adquisitivo de sus salarios a causa de la inflación y fueron protagonistas de una intensa agitación laboral, concretada en una oleada de huelgas que se hicieron eco de la revolución bolchevique rusa. Un país especialmente sensible a la crisis y a la agitación social fue Alemania, obligada tras los tratados de paz a indemnizar a los vencedores con ingentes sumas de dinero.
Adolfo Meisel Julio E. Romero La Guerra de los Mil Días fue la más letal y costosa guerra civil de Colombia. Hay cierto consenso sobre las consecuencias materiales, pero menos atención ha recibido la pérdida de vidas humanas. Aunque muchos historiadores repiten la cifra de 100. 000 víctimas, no está respaldada por un análisis formal. Dado que la población apenas superaba los 4 millones, es una cantidad elevada que amerita una revisión cuidadosa. Utilizando los censos colombianos y los registros del Human Mortality Database, este documento estima el patrón de edad de la mortalidad y evalúa el aumento que estaría relacionado con la guerra. Observando la experiencia de otros países, los modelos ayudan a estimar un valor máximo posible de pérdidas humanas. Si la mortalidad colombiana hubiera aumentado tanto como en Francia durante la Primera Guerra Mundial, el número de víctimas no superaría los 100. 000. En un caso mucho menos extremo, si hubiera aumentado tanto como en Inglaterra y Gales durante la Primera Guerra Mundial, el número de muertos sería de 38.
Un año más de matanza y todo habría quedado como debiera (1). Una de las peores secuelas de la guerra son los odios heredados que se suman a los creados al calor de anteriores guerras y que alimentarán los del futuro. La paz de los ejércitos llegó tres años más tarde. Pero la paz de los espíritus tardó más tiempo. Du rante años continúan las retaliaciones. Veamos dos ejemplos individuales: …en el sitio denominado Pelahuevos. sale de la espesura una perdigonada que certeramente hace blanco en cl general Gallo, quien cae de su cabalgadura, muerto instantáneamente. ¿Quién paveó al general Gallo? No tardó en saberse; fue Joaquín Rojas Montañés, el autor de ese inútil y repugnante crimen, quien huyó al Quindío. Carlos Mejía, coronel gobiernista, logró aprehenderlo en la región de Armenia; decapitólo, y ensartando la barbuda cabeza en una asta, trájola a Ibagué. Trece años después todavía se vertía sangre como consecuencia del crimen de Pelahuevos. Pasada la guerra. Carlos Mejía se internó en la región de Chili, donde abrió en la montaña una buena hacienda.
El poder se divide en dos bloques: Bloque capitalista – Políticas económicas capitalistas y democracia instaurada en Europa Occidental y liderado por Estados Unidos. Bloque comunista – Políticas económicas comunistas y apoyo a las dictaduras que el propio líder la URSS tenía en su país de la mano de Stalin. Influencia en Europa del Este. Conferencias de Paz de la Segunda Guerra Mundial En los meses finales de la Segunda Guerra Mundial y tras el punto y final de la misma, los lideres de los países aliados se reunieron en distintas conferencias en las que se negociaron aspectos relacionados con la paz, la restauración de Europa y los acuerdos de rendición de las potencias del Eje. Destacamos la Conferencia de Yalta y la de Postdam y la formación de la ONU. Conferencia de Yalta Yalta es una población situada en la península de Crimea en territorio Ruso. En esta ciudad se produjo en Febrero de 1945 la reunión de los líderes de las tres potencias aliadas, UK, EEUU y URSS cuando la derrota de Hitler era inminente.
En cuanto a los resultados de la contienda, medidos en números, es poco lo que puede decirse con absoluta certeza. Las cifras dadas en la época y las calculadas posteriormente difieren mucho. Citamos varias fuentes, para que el lector se forme una idea. El número de combatientes se estimó en 110. 000 hombres (75. 000 por parte del gobierno y 35000 por los liberales). Teniendo en cuenta el total de beligerantes, parecen exagerados los cálculos de muertos, a pesar del encarnizamiento de la contienda. Jorge Holguín los estima en180. 000; Luis Eduardo Villegas en 100. 000; el coronel Leonidas Flórez Alvarez los calcula en 60. 000. Igualmente discrepantes son los cálculos del costo de la guerra: 25 millones de pesos oro según Jorge Holguín, 75 millones de acuerdo con Eduardo Silvestre y 370 millones según estimado de Luís Eduardo Villegas. Los precios de los víveres y artículos de primera necesidad se salieron del cauce, desbordados. Fue tal la escasez y carestía de alimentos. que para marzo de 1901 el gobierno decretó la importación de víveres durante la contienda, hasta 60 días después de su terminación.
Los núcleos urbanos empiezan a demandar cemento, hierro y vidrio. Los paisajes urbanos dejan atrás la tapia y el adobe tradicionales. En cada una de las ciudades acogen a las nacientes clases sociales. Además, el café nos generó una identidad y permitió construir una imagen positiva, pues desde entonces somos el país cafetero por antonomasia. Nuestro país no se enganchó con la primera revolución industrial, la del carbón, sino que lo hizo al ritmo de la electricidad y estas décadas fueron las del inicio de la electrificación que transforma la vida cotidiana urbana al ritmo de la iluminación nocturna, de las fábricas y talleres que cuentan con una nueva fuente de energía, de los cines que, de la noche a la mañana, surgen en las ciudades. Y el eco de las voces de la radio rompe los aislamientos ancestrales. En fin, una acelerada, aunque tardía, modernización que estaba sacudiendo un país que presentaba una nueva geografía nacional en razón de la consolidación de nuevas urbes como Barranquilla y Manizales, entre otras, y de la apertura del canal de Panamá (1914) que le permitió al país, por fin, abrirse a la costa Pacífica, hacia el puerto de Buenaventura.
Los participantes fueron Winston Churchill, Franklin D. Roosevelt y Joseph Stalin. Las decisiones más importantes tomadas en esta reunión fueron la previsión del reparto de Alemania y la reestructuración de Polonia que perdió los territorios conquistados por Stalin y adquirió la parte este de Alemania. Además se previó la creación de un organismo internacional encargado de salvaguardar la paz y la seguridad, la Organización de las Naciones Unidas que sustituiría a la Sociedad de Naciones en 1946. Conferencia de Postdam Celebrada entre Julio y Agosto de 1945 reunió a los tres países que participaron en la Conferencia de Yalta pero hubo cambio de protagonistas. El representante británico fue el nuevo Primer Ministro Clement Attlee, Harry S. Truman sustituyó a Roosevelt como presidente de los Estados Unidos y el único que se mantuvo fue Joseph Stalin. En Postdam se acordó la división de Alemania en cuatro zonas de influencia que quedaban en manos de EEUU, Francia, Reino Unido y la Unión Soviética respectivamente.
Al regreso de Cuba comenzó, por una íntima convicción, a investigar sobre las mentiras de la historia oficial colombiana. La separación Iglesia-Estado fue una de sus obsesiones; a través de esa lucha estructural comenzó a interesarse por el siglo XIX. La propiedad de la tierra era vista con una agudeza que dio pie a una verdadera escuela histórica colombiana. Cuando llegó a investigar la guerra de los Mil Días, basado en las memorias de Lucas Caballero, ya tenía una idea totalmente formada de lo que había pasado, estaba pasando e iba a pasar en Colombia. Fundador original de la revista Alternativa, al poco tiempo se desentendió de la producción y orientación de la misma, por una mezcla de seguridad de que lo estaban haciendo bien las divas que quedaron al frente, pero también porque quería hacer otras cosas y además porque tenía que vivir en Medellín, pues la altura de Bogotá le afectaba una debilidad del corazón. Antes de Medellín, trabajó en el Dane y allí inició la lectura obsesiva de periódicos que culminaron con esa pieza maestra de la historiografía de fuente periodística que fue Sucesos Colombianos 1900-1925.
La radiactividad ioniza el aire, liberando carga eléctrica. Aunque se sabe desde hace tiempo que la carga eléctrica afecta a la formación de las nubes, observar este fenómeno en la naturaleza es complicado. Al combinar los registros meteorológicos con los datos sobre los test nucleares, los científicos pudieron estudiar este fenómeno de forma retrospectiva. Los investigadores se centraron en analizar los datos recogidos durante los años 60 en dos estaciones situadas en Reino Unido, la de Kew, cerca de Londres, y Lerwick, en las Islas Shetland, a unos 480 km al noroeste de Escocia. Esta estación se encuentra en una zona bastante virgen a la que no llegan otras fuentes de contaminación causada por el hombre. "Para el periodo que analizamos en nuestro trabajo las principales contribuciones probablemente provinieron del Hemisferio Norte, en concreto de los test que se hicieron en el Ártico, pero también hubo radiactividad procedente del Hemisferio Sur que se dispersó mucho", señala este especialista en física atmosférica que, para hacer este trabajo ha colaborado con científicos de las también británicas universidades de Bath y Bristol.