Una gran mayoría social lo piensa: no sólo es corrupto quien ha expoliado, sino también quien lo ha permitido mirando hacia otro lado. Sin esta parálisis institucional el nivel de podredumbre no hubiera alcanzado cotas tan alarmantes, ni nos veríamos como el reino de la impunidad. El Derecho llega tarde para ser el principal definidor de la corrupción, máxime en un Estado que carece de justicia independiente. La corrupción es una noción social previa al Derecho. La sociedad española ha ido aceptando, no sin espanto, que comprende el problema mejor que muchos jueces y fiscales. Ya no soportamos los comentarios de altos cargos defendiendo su independencia de criterio, cuando en realidad son títeres de los intereses políticos que les han colocado en el cargo. La corrupción pervierte hasta la médula la finalidad de las Administraciones Públicas. Sus modalidades delictivas (prevaricación, cohecho, malversación o apropiación indebida, entre otras) hacen peligrar los cimientos de las Instituciones.
En política, el concepto de corrupción refiere al acto de abuso de poder para sacar un provecho, generalmente económico, que no responde a las funciones que ese poder asigna. Con esto se ve la relación con el espíritu etimológico del término: en la política, el poder debe tener un fundamento filosófico de búsqueda del bien común, y la vulneración de eso por perseguir intereses individuales es uno de los actos por excelencia de traición, y por lo tanto, de corrupción. Actos de corrupción La corrupción aparece tanto en la función pública como en la privada. Pero concretamente, ¿de qué hablamos cuando mencionamos actos de corrupción? He aquí algunos ejemplos: La extorsión al amparo de altos cargos en la función pública o privada, para obligar a otras personas a hacer cosas más allá de sus funciones. La falsificación de las adjudicaciones públicas, con contrataciones falsas y por fuera de las vías que la ley impone. El tráfico de influencias, utilizando los beneficios o las amistades en los cargos jerárquicos para favorecer o perjudicar causas o proyectos.
Qué es Corrupción: Corrupción es la acción y efecto de corromper, es decir, es el proceso de quebrar deliberadamente el orden del sistema, tanto ética como funcionalmente, para beneficio personal. Además de que el corrupto comete una acción ilegal, también presiona u obliga a otros a cometer tales actos. La palabra corrupción proviene del latín corruptio, que se forma de los vocablos con, que quiere decir 'junto', rumpere, que quiere decir 'quebrar' y el sufijo -io, que quiere decir acción y efecto. La corrupción suele estar relacionada en el imaginario popular con el mundo de la política y el enriquecimiento ilícito, es decir, con el dinero, pero no solo con eso. La corrupción aplica a muchas instancias. Por ello, existe corrupción política, corrupción económica, corrupción sexual, etc. Esto se debe a que los dos grandes factores de intercambio que movilizan la corrupción suelen ser el dinero, el poder y el sexo. De un modo u otro, la corrupción suele estar enmarcada en relaciones de poder entre los sujetos, sea en escala micro o macro, sea privada o pública.
Se entiende como corrupción política al mal uso del poder público para obtener una ventaja ilegítima: "Los casos de corrupción de este país han llegado a las primeras planas de los diarios del mundo", "El ex presidente será enjuiciado por corrupción en la compra de un avión", "Me encargaré de perseguir la corrupción para que no haya ningún escándalo en mi gobierno". En estos momentos, tal y como conocemos a través de los diversos medios de comunicación mundiales, se han producido numerosos casos de corrupción política. Esto viene a demostrar no sólo la impunidad con la que pueden actuar los distintos dirigentes sino también la necesidad del endurecimiento de las leyes para estas situaciones y de una reforma política generalizada. Asimismo hay que establecer que existen diversas instituciones y organismos que tienen como clara función el acometer lo que sería el control de la citada corrupción. Entre ellos destaca, por ejemplo, Transparencia Internacional (TI). Una organización no gubernamental, fundada en la década de los años 90 y con sede en Berlín (Alemania), que se encarga de desarrollar distintas medidas con el claro objetivo de ponerle fin a la anteriormente citada acción.
La corrupción consiste en el […] abuso de posiciones de poder o de confianza, para el beneficio particular en detrimento del interés colectivo, realizado a través de ofrecer o solicitar, entregar o recibir bienes o dinero en especie, en servicios o beneficios, a cambio de acciones, decisiones u omisiones […] (Transparencia por Colombia). El Banco Mundial define la corrupción como el "uso indebido de servicios públicos para beneficio personal". [1] Bajo el esquema utilizado tradicionalmente por Transparencia por Colombia, la corrupción también puede ser tipificada como pequeña y gran corrupción. La "pequeña corrupción" puede ser entendida "como el conjunto de actos en que se conceden gabelas, ventajas o tratamientos preferenciales en contratos de bajo monto o en trámites ante el Estado". [2] La gran corrupción o "corrupción a gran escala", consiste en actos cometidos en los niveles más altos del gobierno que involucran la distorsión de políticas o de funciones centrales del Estado, y que permiten a los líderes beneficiarse a expensas del bien común [3].
[1] World Bank Global Issues Seminar Series, 2005. The Cancer of Corruption. Vinay Bhargava, Director, International Affairs, The World Bank. [2] Estos conceptos son tomados de Transparencia por Colombia, Guía práctica para la elaboración de mapas de riesgos y planes anticorrupción, mayo de 2014. [3] Diccionario sobre conceptos de lucha contra la corrupción, transparencia, ética e integridad, Transparencia por Colombia, 2017
España es uno de los países que en los últimos años ha visto cómo salían a la luz más casos de corrupción por parte de sus dirigentes. De ahí que no sólo se haya producido un cambio en la mente de la ciudadanía respecto a los políticos o que la nación haya sufrido una grave crisis económica sino también que hayan surgido iniciativas como la plataforma "Ciudadanos contra la corrupción 2. 0". El tráfico de influencias, el soborno, la extorsión y el fraude son algunas de las prácticas de corrupción, que se ven reflejadas en acciones como entregar dinero a un funcionario público para ganar una licitación o pagar una dádiva o coima para evitar una clausura. A la corrupción se encadenan otros delitos, ya que el corrupto suele incurrir en la práctica para permitir o solicitar algo ilegal. Un policía resulta corrupto si recibe dinero de un hombre para que le permita robar en una casa sin intromisión policial. En este caso, se juntan dos delitos: el acto de corrupción y el robo.
Las relaciones de poder no se limitan al mundo de la política. Todos los ámbitos sociales donde existen jerarquías y/o recursos, tales como empresas, compañías, entes públicos, centros educativos o centros de reunión religiosa, pueden ser ocasión de actos de corrupción. Esto quiere decir que puede haber corrupción tanto al nivel de la gran política, como en la pequeña escuela primaria, siempre que haya alguien que controle la situación de poder o que pretenda controlarla. Ver también Antivalores. Lavado de dinero. Lobby. Formas o tipos de corrupción En cada país, la ley tipifica claramente las formas de corrupción y establece penas específicas para cada una según el grado. Aun así, pueden existir otras formas de corrupción que no estén contempladas en ella, pero que sí son consideradas formas de corrupción de acuerdo al sistema ético de una determinada cosmovisión. Entre las formas de corrupción definidas en los documentos legales normalmente, tenemos: Soborno: ofrecer dinero a cambio de algún beneficio, tal como evitar una multa, obtener una nota en un examen, obtener una licitación, etc.
No obstante, gran parte de la judicatura española no advierte la menor irregularidad en este proceder, salvo que se pruebe la amistad "íntima" entre el abogado y el sentenciador; algo, por cierto, medio imposible de probar. En definitiva, la noción de corrupción impuesta, en muchas ocasiones, no asume lo que la sociedad percibe claramente como indignante. La corrupción y su repercusión no suelen preocupar en el día a día del lento quehacer judicial. Nuestros juzgados son adictos al trámite y al volcado mecánico de resoluciones, bajo tiempos y formas precisas para adaptarse a los requerimientos del Consejo General del Poder Judicial. Esta fuerte impronta burocrática posterga, e incluso menosprecia, la sana preocupación por innovar la interpretación de las normas. La mentalidad jurídica cerrada a la evolución se ajusta a la ley como la dura cáscara de una tradición más impuesta que razonable. Sólo así puede entenderse la colosal falta de adaptación a la realidad social de nuestros tribunales, por ejemplo, en el caso de las cláusulas suelo o respecto del vencimiento anticipado de deudas hipotecarias.
Se trata de una descomposición (con sustancias que se van hinchando, luego secándose y pudriéndose), por la que los cuerpos lentamente se van transformando en formas menos complejas y más simples. En la literatura y lingüística también se denomina corrupción a una situación que puede darse cuando una palabra es utilizada de forma diferente de la que establece su definición, está ocurriendo un fenómeno de corrupción lingüística. También ocurre si en cualquier obra escrita, a partir de una traducción, corrección o redacción, aparece una alteración con respecto a la versión original. En informática, se sabe que el almacenamiento de los datos no es un acto infalible, y si los bits alteran la presentación de los datos (cosa que puede suceder por ataque de virus, por mal funcionamiento del sistema operativo, o simplemente por una mala transmisión de datos), se considera que es un archivo corrupto. Cuando se habla de casos de corrupción de menores es porque existe un mayor de edad que, abusándose de una situación de indefensión, somete a un menor a realizar actividades como la prostitución, que lo pueden perturbar psicológicamente de un modo muy grave, corrompiendo así su personalidad y su desarrollo psicológico.